domingo, octubre 13, 2013

JOSÉ MARTÍN DE ALDEHUELA, ARQUITECTO TUROLENSE DEL SIGLO XVIII

Por: Carlos Blázquez
Este mes de septiembre (2007) se cumplen 205 años de la muerte de uno de los más grandes arquitectos e ingenieros nacidos en Aragón. Se trata de José Martín de Aldehuela, un nombre que difícilmente dirá algo a los lectores, aunque muchos de ellos han pasado junto a uno de sus trabajos.
Este gran arquitecto nació en Manzanera el día 14 de enero de 1724 y murió en Málaga el 7 de septiembre de 1802. Nació con el nombre de Joseph Martín de Lizanda en una familia de agricultores, a los cinco años fue entregado a su padrino con el que se crió y aprendió el oficio de retablista en la pedanía turolense de Aldehuela, de la cual tomó el nombre con el que fue conocido.
Con tan solo 21 años construyó la iglesia de los jesuítas de Teruel, luego seminario. A los 30 trabajó en la Santa Capilla del Pilar, y aunque se desconoce por el momento la naturaleza de sus trabajos, seguro que fueron de gran relevancia.
El buen hacer de Aldehuela en el Pilar no fue recompensado en Aragón, sino en Cuenca, donde se le encomendó la terminación y el embellecimiento del oratorio de San Felipe y muchas otras obras importantes, entre las que se incluyen los trabajos del interior de la Catedral. De hecho, no solo trabajó en Cuenca capital, sino que también es autor de algunas iglesias de la provincia, como la del convento de San Miguel de las Victorias, en Priego; la iglesia del castillo de Garcimuñoz, en Huete; la de Paracuellos, o la de San Bartolomé en Cólliga.

Iglesia de Orihuela del Tremedal
En estos tiempos de intensa actividad levantó otros templos, tales como la de San Millán en Orihuela del Tremedal (Teruel); la iglesia parroquial de Terzaga (Guadalajara), y la iglesia de San Pedro y San Pablo en Madrigueras (Albacete).
Martín de Aldehuela no se limitó a la realización de edificios de carácter religioso. Entre sus obras civiles podemos destacar en Cuenca las llamadas Casas Pretorias, las del Santo Oficio y la singular Casa de Recogidas. También construyó la presa del Molinillo en Postigo, el empedrado de la calle de San Pedro y un molino de papel en Palomera. Pensarán los lectores que con un historial así merecería ser conocido, puesto que buena parte del mérito de que Cuenca sea Patrimonio Mundial de la Humanidad se debe a la obra de Aldehuela.
El maestro aragonés recaló más adelante en Málaga donde llegó a ser el más reputado arquitecto e ingeniero. Allí construyó las cajas de los órganos de su catedral, el diseño del Tabernáculo, la capilla de la Encarnación, la ornamentación final y el diseño de las rejas y el atrio así como su colocación, las cadenas del Patio de los Naranjos, el retablo de San Sebastián, la terminación del palacio episcopal, la iglesia de San Felipe, la iglesia de las Dominicas de la Divina Providencia, la cabecera y ampliación de la iglesia de San Juan,, la iglesia de San Agustín, la ampliación de la parroquia de San Pedro, el retablo y la espadaña de los Trinitarios y realizó otros trabajos en la iglesia de los Jesuítas, todo ello en cuanto a arquitectura religiosa.
TRABAJOS CIVILES
Sus trabajos en arquitectura civil son asimismo de gran relevancia: portada del Montepío de Cosecheros o casa de los Jesuítas (hoy sede de la Sociedad Económica de Amigos del País), el Consulado, el palacio del Conde de Villalcazar, los jardines del Retiro en Churriana, la casa de Expósitos, casas en las calles de San Agustín, Cilla, Dos Aceras, Verdeja y Arriola, las casas del cabildo eclesiástico, intervención en el puente del Rey, intervención en la colegiata de Antequera, la parroquia de San Juan en Vélez-Málaga, los retablos en las parroquias de Nerja y el cementerio de Cortes de la Frontera.

Vista aérea del Puente Nuevo de Ronda
Hemos dejado para el final una de las grandes obras de la época, como fue el acueducto y los molinos de San Telmo, que fue el primer abastecimiento de agua a Málaga. Esta conducción contaba con 30 kilómetros de longitud y más de treinta acueductos entre su nacimiento y la ciudad, donde también hizo las arcas, fuentes y toda la red de canalizaciones. José Martín de Aldehuela recaló después en Ronda, donde terminó su monumental plaza de toros y también llevó el agua hasta la ciudad, levantando entonces su famoso acueducto “romano” o “árabe” de la Hidalga, pero que en realidad es obra de Aldehuela, un trabajo que comenzó en 1789 y finalizaría hacia el año 1793. En Ronda levantó la obra que debería haberle hecho famoso en toda España, su Puente Nuevo.
Tras estos éxitos, le sucedieron una serie de desgracias personales que culminaron cuando el concejo de Ronda no le pagó el puente ni la conducción de agua, alegando para ello que, tras el incendio de su archivo, no tenía constancia de que no hubiese cobrado su trabajo o tan siquiera de que lo hubiera hecho.
Morir solo y en la ruina es triste para quien fue tan importante...
Fuente: Heraldo de Aragón 16-9-2007 Autor del reportaje: Carlos Blázquez
Les adjunto un enlace a un excelente PDF creado por un familiar directo de Aldehuela, en él encontrarán un completo informe de este gran personaje turolense.

http://manzanera.comuf.com/Documentos/Aldehuela.pdf 

http://www.revistateruel.org/Convenios/IET/Revista.nsf/EE1F0505581D73F1C12571E3003DE55F/$FILE/Teruel_86_II_4.pdf 

Más información:

http://es.wikipedia.org/wiki/Mart%C3%ADn_de_Aldehuela

http://www.aache.com/alcarrians/aldehuela.htm 

Fotos: Ronda: http://cityguidesblog.com/conociendo_la_serran_de_ronda
Iglesia de Orihuela del Tremedal: http://www.turismosierradealbarracin.com/images/weblog/71.jpg


1 comentario:

lucia perez dijo...

Muchas gracias por la interesante información y enlace.